BIO Harina de linaza: una excelente elección para enriquecer sus platos.

La harina de linaza es harina hecha de semillas de linaza molidas, que son ricas en nutrientes y tienen numerosos beneficios para el organismo humano. Puede incorporarla fácilmente en su dieta y añadir valor nutricional a sus platos.

No es adecuada para consumir sola, pero se puede utilizar de muchas maneras:

• Productos horneados: se utiliza como aditivo o sustituto de parte de la harina en pan, pasteles, magdalenas, panqueques, etc.,
• Como espesante: es adecuada para espesar sopas, salsas, batidos, etc.,
• Como sustituto de los huevos: mezclada con agua se puede utilizar en lugar de huevos para diferentes recetas (1 cucharada de harina de linaza + 3 cucharadas de agua = 1 huevo).

Fuente vegana de fibra alimentaria para hornear, cocinar y espesar platos.

BIO Harina de linaza de la marca Raab Vitalfood es versátil y representa una excelente fuente de fibra alimentaria.

• Tiene un sabor ligeramente a nuez.
• **Absorbe bien el líquido y por lo tanto es adecuada para cocinar y hornear.
• Se obtiene de semillas de linaza, que están parcialmente desgrasadas - las semillas se prensan en una prensa de aceite y luego se muelen en polvo.
• Se produce de acuerdo con las directrices de cultivo ecológico.
• Es 100 % natural y vegana, sin lactosa.

Uso recomendado: Máximo 10 g (1 cucharada colmada) al día.

Como sustituto de huevo: Deje remojar 1 cucharada de harina de linaza en 3 cucharadas de agua tibia durante 5 minutos. La mezcla resultante es especialmente adecuada como aglutinante en platos salados (por ejemplo, hamburguesas) o por ejemplo, para galletas de nuez.

Ingredientes: harina de linaza*, parcialmente desaceitada. *De cultivo ecológico certificado. DE-ÖKO-001. Agricultura UE. Origen: Austria, Polonia.

Puede contener trazas de gluten. 

Cantidad neta: 200 g

Advertencia: No apto para niños. El color y el sabor pueden variar, ya que se trata de un producto natural y está sujeto a fluctuaciones estacionales. El nivel de llenado puede variar por razones técnicas. Almacenar bien cerrado, en un lugar fresco y seco, protegido de la luz y el calor.